Como todos sabéis, el oro es uno de los metales más apreciados, y sin duda el más usado para fabricar joyas en todo el mundo.
Sin embargo, a menudo los clientes tenéis muchas dudas sobre los tipos de oro que existen, y me preguntáis mucho por ello.
Por eso, he decidido dedicar mi primer post en el blog a este tema, que aunque puede parecer un poco intenso, es importante tener claro cuando estamos comprando joyería.
¡Espero que os resulte interesante!
Si os interesa este tema, podéis leer también mi artículo sobre los diferentes tipos de gemas usados en joyería.
¿Conoces la calidad de tus joyas?
Quilates, milésimas, leyes, aleaciones… en el mundo de la joyería se emplean términos específicos que a veces pueden resultar un poco confusos.
En realidad, todo se reduce únicamente a dos parámetros que debemos tener en cuenta:
- la pureza del oro
- el tipo de aleación
La pureza:
La pureza del oro se expresa, generalmente, en kilates (k).
Estos kilates no deben confundirse con los quilates (ct), utilizados para medir el peso de las piedras preciosas, y que es una unidad de medida totalmente diferente.
Se considera que el oro puro tiene una pureza de 24k, y a partir de ahí, se calculan el resto de las purezas:
Kilataje | Porcentaje de oro | Milésimas | Ley |
24k | 100% | 1000 | - |
18k | 75% | 750 | 1ª ley |
14k | 58,5% | 585 | 2ª ley |
9k | 37,5% | 375 | - |
Tradicionalmente en España se han usado en joyería dos tipos de oro, regulados por ley: el de 18k y el de 14k, denominados respectivamente oro de primera y de segunda ley.
A veces se utiliza también el término “oro bajo” para referirse a cualquier pureza de oro por debajo de los 18k, sea de 14k o inferior.
Aunque esta terminología ya no es vigente hoy en día, se sigue utilizando aún con frecuencia.
En la actualidad, lo más frecuente es expresar la pureza del oro en kilates o en milésimas.
- El oro puro, de 24k, no se emplea habitualmente en joyería, por no tener una consistencia adecuada para trabajarlo. Sí es algo más habitual en algunos países como La India.
- El oro de 18k y el de 14k se emplean ampliamente en joyería, debiendo especificarse siempre de cuál de los dos se trata, ya que la diferencia de precio es bastante notable.
- El oro de 9k tiene un porcentaje de oro muy bajo, bastante menos de la mitad de su composición es oro. Puede producir alergias, puede oxidarse , y se considera en general de baja calidad. De hecho, el oro de 9k no puede comercializarse legalmente como “oro” en algunos países, como EEUU.
En España, sin embargo, sí es legal su comercialización, siempre y cuando se indique claramente su grado de pureza.
Pepitas de oro en bruto: el oro puro es siempre de color amarillo
La aleación:
El oro puro (24k) es amarillo, siempre.
Es al mezclarlo con otros metales (para conseguir oro de 18k, 14k, u otros), cuando puede cambiarse su color. A esta mezcla de metales se le denomina aleación.
¿Por qué alear el oro?
Hay diversos motivos para hacerlo:
- Conseguir mayor dureza del metal (el oro de 24k es blando y difícil de trabajar)
- Conseguir variar la gama de colores
- Reducir el coste
Los metales que pueden usarse para mezclar con el oro son muy variados, cada uno con diferentes propiedades, y según resultado final deseado escogeremos unos u otros.
Tipo de aleación | Metales utilizados |
Oro amarillo | Plata y cobre, normalmente a partes iguales |
Oro rosa | Plata y cobre con mayor proporción de cobre |
Oro rojo | Cobre |
Oro blanco | Níquel, paladio, platino, plata… |
A menudo, cada fabricante utiliza sus propias aleaciones y casi nunca se especifica qué metales contienen. Eso sí, siempre deben contener como mínimo el porcentaje de oro requerido para los quilates con los que se comercialice. Es decir, para oro de 18k podemos usar hasta un máximo de un 25% de otros metales. Pero dentro de ese 25%, la composición y las proporciones pueden variar según el fabricante.
En general, para oro de 18k los colores son más sutiles que para oros de kilatajes más bajos. Esto se debe a que el oro de 18k (de cualquier color) contiene un 75% de oro puro, y el oro puro es siempre amarillo, con lo que los colores de oro de 18k (incluso el blanco) van a tener siempre una tonalidad amarillenta.
Para oro de 14k, ya pasamos a un 58% de oro puro, con lo cual tenemos un 42% de metal que podemos añadir para modificar el color, pudiéndose conseguir colores bastante más intensos.
Diferentes tipos de oro y purezas, con acabado en mate y en brillo
Oro amarillo:
Es el oro clásico, atemporal. El oro se alea con una mezcla de plata y cobre, generalmente a partes iguales, pero no siempre. Si se aumenta la cantidad de plata, se conseguirá un oro más pálido. Si se aumenta la de cobre, más rosado.
Oro rosa y rojo:
Una opción muy bonita, y muy de moda en los últimos años. El oro se alea con plata y cobre, pero aumentando la proporción de cobre. Cuanto más se aumente la proporción, más intenso será el color rosado, hasta llegar al llamado oro rojo, que sólo lleva oro y cobre. El color del oro rojo, sin embargo, no es rojo, sino un rosa un poco más intenso.
Oro blanco:
Es seguramente el oro que más confusión genera, porque sus aleaciones son muy variadas. Todas ellas usan metales de color blanco (paladio, platino, plata, níquel…), en proporciones variables.
Según los metales usados, el resultado final será ligeramente diferente en cuanto a dureza, blancura y precio.
Generalmente cada joyero tiene su “receta” de oro blanco, y no siempre la revelan.
Por ejemplo, el oro blanco aleado exclusivamente con paladio es muy blanco, pero también muy duro (difícil de trabajar para el joyero), y bastante más caro que otras aleaciones.
En general, el oro blanco (en especial el de 18k) siempre va a tener una tonalidad ligeramente amarillenta, debido a que la mayor parte de su composición es, precisamente, oro.
Para conseguir un tono blanco puro, lo habitual es bañar la pieza terminada en rodio, un metal muy blanco. Esto da un acabado muy blanco y muy brillante, pero con el tiempo se desgasta y debe volver a bañarse.
Si se trata de piezas con poco roce, como pendientes, pueden pasar muchísimos años hasta que se desgaste el rodio. Pero en joyas como las alianzas, que sufren roce constante, el rodio se perderá en cuestión de meses.
Otros tipos de oro:
En el mercado gran variedad de aleaciones de oro menos comunes, como por ejemplo el oro verde (aleado sólo con plata), o el oro negro (con cobalto).
Estos colores son sutiles, en ningún caso verdaderamente verde o negro.
Además, podemos encontrar productos con baños y chapados cuyos nombres comerciales a menudo incitan a error:
- Rodio negro:
A una pieza de oro de cualquier color y pureza se le puede dar un baño de “rodio negro”. A menudo esto se confunde con “oro negro”. Pero ni es oro, ni es rodio. El rodio natural es siempre de color banco, pero se le añaden tintas negras para que adquiera este color característico, y se denomina “rodio negro”.
- Oro “vermeil”:
En algunas tiendas o páginas web podéis encontrar comercializado el llamado “oro vermeil”. El oro “vermeil” no es en realidad oro, sino plata de ley chapada en oro. Para poder denominarse “vermeil”, el chapado debe ser de al menos 2,5micras y puede ser de cualquier color y kilataje, pero se debe especificar.
Lingotes de oro de 24k, para inversión
Bueno… finalmente me ha quedado un post muy extenso, pero me parece un tema muy interesante, y ¡quería explicarlo bien!
Espero no haberos aburrido, yque os haya quedado claro.
Si queréis conocer más sobre el mundo de la joyería, no dejéis de leer mi artículo sobre los diferentes tipos de gemas usadas en joyería.
Si tenéis alguna duda o pregunta, por favor dejadlo en los comentarios, ¡estaré encantadísima de responderos!